miércoles, 24 de septiembre de 2014

El bramido del ciervo....LA BERREA.

       El ciervo, animal totémico, símbolo de elegancia, del arte y la poesía, desde la antigüedad tuvo su cornamenta asociada a la sabiduría que se expresaba a través de sus cuernos como representación de la conexión con el cielo, ya que su forma en “ramaje” o copa de árbol estaba “dispuesta a recoger las fuerzas celestes”. También son signo de fertilidad, además de que la cornamenta y la piel del ciervo era un ropaje utilizado por chamanes europeos de todas las culturas.
       La berrea es algo muy estudiado por la Etología que es una rama de la biología y de la psicología experimental, que se ocupa del comportamiento de los animales.
         En Sierra Morena, y en particular en nuestro Parque Natural de Cardeña-Montoro,  la época de la berrea está centrada en el mes de septiembre, que es el momento en el que los machos se hacen notar con sus berridos…pero, ¿conocemos lo que quieren transmitir?
       El ciervo es un animal errante y no tiene “encames” asiduos, sino que se acuesta en cualquier lugar que vea conveniente. Gran nadador y saltador, sus hábitos suelen ser nocturnos. Acostumbran a  ir en manadas de machos solos por un lado y hembras con crías por otro. Las hembras respetan una rígida jerarquía establecida por una cierva más vieja que se encarga de desplazar al grupo y elegir los lugares de descanso y comida de la manada.
       Las hembras no tienen astas, pero los machos en verano y en otoño presentan una cuerna muy ramificada. De patas largas y fuertes, cuerpo estrecho, robusto cuello, muy estilizado en general, este animal remata su fina cabeza por dos orejas de gran tamaño y por tanto, posee una agudeza auditiva extraordinaria.
Los ciervos no solo braman sino que pelean, acaban exhaustos y a veces enganchados por las astas que estrechocan.
       Existe un estudio realizado por el CSIC y la Universidad de C-La Mancha, según el cual los individuos mejor dotados y con cornamentas mayores, informan a las hembras de que poseen un semen con un mayor nº de espermatozoides y que la movilidad de éstos es mayor, algo que los convierte en los mejores progenitores de su próxima prole. Estos estudios demuestran que las hembras no tienen por tanto el papel pasivo que hasta ahora se les atribuía, esperando simplemente que el ciervo ganador de las batallas fuera el que se aparejara con ellas.

La berrea constituye un buen recurso y reclamo turístico apoyado incluso por los ecologistas pues supone un elemento potenciador de la zona.

domingo, 21 de septiembre de 2014

Con luna creciente, cesto menguante. Con luna menguante, cesta abundante.

       EL aprovechamiento micológico puede y debe ser visto como vía de desarrollo rural desde la perspectiva comercial y desde la recreativa.
El uso sostenible de este recurso endógeno ofrece al medio rural una oportunidad para la diversificación productiva.  
       El aprovechamiento de los hongos, setas y trufas ha acompañado al hombre desde el origen de las civilizaciones con diferentes fines: alimentario, curativo, ritual, alucinógeno, etc...Hoy día, además de recurso alimentario, es un recurso de ocio y tiempo libre. La creciente necesidad de contacto con la naturaleza demandada por la sociedad actual urbana, hace que una actividad que era marginal, o familiar, o sumergida...pase a ser potenciada a través de jornadas, investigaciones, proyectos, publicidad y concienciación. 
       Todo ello repercute positivamente en el desarrollo de las áreas rurales, desde el punto de vista del contacto con la naturaleza, la degustación gastronómica y el disfrute del  patrimonio, tanto para los habitantes de la zona, como para excursionistas y visitantes.
       Sin embargo, es imprescindible que se haga una gestión sostenible de este recurso  implantando y haciendo cumplir la regulación sobre aprovechamiento y cotos micológicos.
Los hongos son un reino aparte del animal y del vegetal, y se definen como todos aquellos organismos que, por falta de pigmento fotosintético, se han adaptado a diferentes formas de vida (parasitismo, simbiotiemo..) para buscar el alimento en su entorno.
      Ahora que enseguida comenzaremos la campaña de recolección de setas y hongos en Los Pedroches, no debermos olvidar, que para que las setas completen su ciclo biológico y garantizar así la sostenibilidad del recurso:  
no se podrá remover la capa superficial del suelo con rastrillos u otras herramientas y se evitará dañar el micelio subterráneo. Solamente se recogerán aquellas setas que estén maduras. Las inmaduras, pasadas, rotas o alteradas, deberán dejarse en el campo por su valoor para la expansión de la especie y se deben transportar en recipientes o cestas que permitan la aireación y expansión de las esporas.
       No debemos destruir las especies no comestibles o que no logremos identificar pues todas las especies cumplen una importantísima función en el medio natural. No recolectemos setas de láminas blancas, con anillo, o con sombrero blancuzco-verdoso, pues podría tratarsse de alguna de las Amanitas mortales. Y por último, pensando ya en el momento del consumo, es recomendable guardar un ejemplar de cada una en la nevera, pues en caso de intoxicación servirá de ayuda al médico a la hora de determinar el diagnóstico.
        En cuanto a las recetas relacionadas son muchas y variadas...níscalos con productos de la matanza, salteados de setas, lomo ibérico con salsa de setas...Aquí dejamos una muy apetitosa y sana:
"Salteado de setas de cardo con huevo de campo, jamón ibérico D.O.Los Pedroches y gambas":
Limpiar y cortar las setas. Preparar una sartén con aceite de oliva Virgen Extra de la cooperativa Ntra.Sra.de Luna, calentar y saltear en ella las setas junto con el jamón D.O.Los Pedroches y las gambas. Salpimentarlo al gusto. Por último, batir el huevo (de campo de nuestra tierra) y volcarlo sobre los ingredientes antes mencionados y dejarlo en el punto de cocción deseado.


miércoles, 10 de septiembre de 2014

La sencilla armonía de la arquitectura popular

       La arquitectura popular de Los Pedroches tiene un gran valor patrimonial y es en gran medida dependiente de la armonía existente entre el hombre y el entorno geográfico. Podríamos decir que activa nuestra memoria colectiva, comprendiendo nuestro pasado a la vez que dignificamos nuestro presente.
    Nuestro paisaje arquitectónico queda supeditado en gran parte a la actividad económica tradicional desarrollada en la comarca, a la herencia cultural y al devenir histórico.
      En cuanto a las edificaciones y viviendas familiares, se puede apreciar un tipo de construcción más horizontal que vertical. Exteriormente hay que  afirmar que la arquitectura se inserta en el paisaje de dehesas y olivares, y es una seña de identidad nuestra, gracias a la utilización del granito principalmente. También contamos con la cal, que enriquece el aspecto estético al blanquear los enlucidos. Otro elemento clave es el hierro que se  aprecia en ventanas y balcones. Los más antiguos estaban hechos de forja.
(En las imágenes podemos observar todo ello).
       Además hay detalles muy destacados según los distintos pueblos, como las “tiras” de las fachadas de Añora, o los escudos y blasones de Dos Torres, los enchinados de Pedroche, la calle Real de Villanueva de Córdoba, las ventanas con escudos de los Sotomayor de Hinojosa, la calle Hospital de Santa Eufemia y la Puerta de la Villa, etc., etc.
       En el interior, las casas se estructuraban con un pasillo central siempre lo suficientemente ancho, para que pasaran tanto personas como animales, ya que tras atravesar el corral o patio, se llegaba a una parte final o trasera donde se encontraban las cuadras y otros habitáculos para albergue de animales domésticos y de trabajo.
El pasillo además de anchura, tenía una altura importante facilitándose el recorrido con las bestias cargadas y con los aperos de labranza después de terminadas las labores del campo. De ahí que también se empedrara esa parte central del suelo (como podemos apreciar en la  foto). En los techos se admiramos hermosas bóvedas tanto en pasillos como en habitaciones.
       A ambos lados del pasillo se situaban las habitaciones y aún siguen así configuradas la mayoría de las casas actuales, incluso las de nueva construcción.
       Tras el patio y antes de llegar a esta parte del fondo, solía ubicarse la cocina con chimenea que servía además de comedor. Normalmente se iluminaba con ventanas que daban tanto al patio central como al corral final. Muchas de las viviendas tenían un horno, gallinero, huerto y pozo, y prácticamente todas poseían una zona de almacenamiento de cereales en la planta superior, llamada “cámara”.
       Caro Baroja hablaba de que “se puede recuperar la memoria de un pueblo mediante los símbolos que en él perviven”. Y en estas viviendas y construcciones tradicionales de Los Pedroches podemos encontrar señas de identidad a través de símbolos como inscripciones en el granito, escudos, etc. y en el interior de ellas, como pesebres,  establos, pilas de granito para lavar.. De ese carácter simbólico del patrimonio surge la capacidad de plasmar la identidad. La arquitectura popular es el efecto y consecuencia de un conocimiento del clima, de los materiales constructivos y de las exigencias de la vida agropecuaria en nuestra zona.  Es conductora y representativa de toda una forma de vida, y de ahí su belleza, su expresividad , y su sencilla armonía.










miércoles, 3 de septiembre de 2014

"Jabón y buenas manos, sacan limpios paños"

     Desde el año 2.200 a.C. se vienen fabricando jabones caseros según la fórmula que apareció en unas tablillas de arcilla sumerias, con ceniza de madera y  aceite.
La ceniza era el medio alcalino que hacía reaccionar al ácido graso (el aceite) lo que generaba el jabón y la glicerina.
       Si nos concienciamos sobre la necesidad del reciclaje, de prevenir y reducir la contaminación de las aguas residuales domésticas, y nos acostumbramos a la utilización de aceite  usado como materia prima en la elaboración de jabón, obtendremos un producto ecológico y barato a la vez que no perdemos la tradición de nuestros mayores.
Muchos lugares que usan aceite en las cocinas comercialmente, ofrecen su aceite usado para la realización de jabones y productos similares.
       De esta manera obtendremos varios beneficios a la vez: evitar el impacto medioambiental y ahorrar fabricando jabón en gel para la piel, o jabón en polvo o líquido para lavadoras, para suelos, etc. Si además le agregamos esencias florales o frutales conseguiremos un agradable aroma.
       Pero si decidimos comprarlo en vez de hacerlo, hay que tener en cuenta que no todo lo que se oferta en el mercado envuelto en la marca “artesano” lo es, pues muchas veces lleva un exceso de sosa que perjudicará al ph natural de la piel si ese es el uso que queríamos darle.

Volviendo al origen del jabón en la historia, un estudio de la Universidad de Granada publicado en la revista Epccm nº15 (año 2013) nos cuenta así:
"La utilización del jabón se remonta para algunos a la época fenicia, para otros a la
egipcia o en otras civilizaciones orientales como los sumerios, es un producto de
limpieza necesario para el lavado de la ropa y el aseo personal. En las tablillas sumerias
se cita la mezcla de aceite con potasio, resinas y sal. Los fenicios lo fabricaban con
aceite de oliva y sosa caustica o carbonato de calcio obtenida con cenizas de plantas
halófitas que viven en tierras salinosas como la salicornia y la solsola. En Alepo se
fabricaba jabón con aceite de oliva o de laurel. Sin embargo, no han llegado a nosotros
textos sobre este producto hasta los romanos que serían los inventores de su fabricación
tal cómo ha llegado a nosotros en los territorios de lo que llamamos la civilización
occidental. Hay una leyenda de su descubrimiento en el llamado monte Sapo junto al
Tiber. Con los árabes se citan las almonas o fábricas de jabón a finales del siglo X en
Sevilla por la gran cantidad de aceite de oliva. El uso del jabón tuvo fines medicinales y
Galeno lo ve como un producto personal y para lavado de ropas, tiene efectos curativos
en la piel. Plinio el Viejo dice que los galos lo fabricaban con grasas y sebo de cabra
unidas a las cenizas de las hayas que proporcionan potasa, lo usaban para el pelo y le
añaden sal para endurecerlo".
Por último , dejamos aquí una receta de jabón en frío, aunque en caliente es como se hacía normalmente en las casas de la comarca de  Los Pedroches y añadimos unas fotos alusivas al tema (una caldera restaurada actualmente, un recipiente cociendo la mezcla y el jabón hecho ya cortado)
Receta para la elaboración de jabón en frío:
Todo el proceso se hace en frío sin necesidad de realizar ninguna cocción. Los ingredientes necesarios para fabricar el jabón son:
– 1 y medio litro de aceite de oliva usado
– 1 +½ litro de agua que varía según las veces que se ha usado el aceite. Cuanto más se ha reutilizado, menos sosa se pondrá (si es para la piel no poner más de 200 gramos de sosa). Un poco de harina ayudará a espesar la masa. Pasos:
1. primero mezclamos bien el agua y la sosa (con las manos protegidas) hasta que no quede cristal
2. Añadir el aceite lentamente y sin parar de remover.
3. Si se opta por añadirle harina, incorporarla poco a poco hasta que la masa espese.
4. Colocar en un molde y dejar reposar 24 horas. Conservar en lugar fresco y seco.